4 de julio de 2012

[Reseña] Bloodlines de Richelle Mead

BloodlinesSinopsis

Sydney is an alchemist, one of a group of humans who dabble in magic and serve to bridge the worlds of human and vampires. They protect vampire secrets - and human lives. When Sydney is torn from her bed in the middle of the night, at first she thinks she's still being punished for her complicated alliance with dhampir Rose Hathaway. But what unfolds is far worse. Jill Dragomir - the sister of Moroi Queen Lissa Dragomir - is in mortal danger, and the Moroi must send her into hiding. To avoid a civil war, Sydney is called upon to act as Jill's guardian and protector, posing as her roommate in the last place anyone would think to look for vampire royalty - a human boarding school in Palm Springs, California. But instead of finding safety at Amberwood Prep, Sydney discovers the drama is only just beginning.

 

Richelle Mead es simplemente brillante, la idea de hacer un “spin-off” de Vampire Academy es magnífica. Primero, porque tenemos la posibilidad de conocer más a fondo personajes que en la famosa saga solo eran secundarios, segundo porque seguimos en el mismo universo creado en Vampire Academy (el que personalmente disfruto mucho) y tercero podemos saber que tal les va a los personajes protagonistas de la saga anterior ;)

La protagonista de Bloodlines es Sydney, sí la alquimista no muy simpática y algo psicorrigida que sale en las ultimas aventura de Rose. Sydney está en una situación delicada con los Alquimistas luego de haber ayudado a Rose, como sabrán los alquimistas cooperan con los Monroi pero no se mezclan con ellos, ya que su propósito es mantener a los humanos salvos e ignorantes de los vampiros. Así que para ella es toda una sorpresa cuando le asignan la misión de cuidar de Jill, haciéndose pasar por su hermana e inscribiéndose como estudiante en un internado de Palm Springs. Ella junto a Eddie (dhampir que ya conocemos), Adrian (monroi que seguro conocemos ;) ) y Keith (un alquimista que le dará mucha agua de beber a Sydney) son los que forman la comitiva protectora de Jill.

Este libro tiene varios elementos de la anterior saga sin pecar de ser repetitivo. La trama inicia justo donde terminó Last Sacrifice. El problema es que ahora que Lissa es reina hay unos cuantos monroi que no están de acuerdo con ella e intentan sabotear su reinado atentando contra su única familia: Jill. Por esa razón, la corte decide ocultar a Jill en una de las ciudades más soleadas de Estados Unidos. Sydney no está muy contenta con compartir habitación con un vampiro, pero ella es una alquimista y su trabajo siempre va primero.

Ese es otro punto que me gustó de este libro, Sydney y Rose son muy diferentes. Mientras Rose era una rebelde por naturaleza siempre metiéndose en líos, Sydney es totalmente obediente con su organización y no le importa sacrificar su propia felicidad para cumplir con su misión. Le fui cogiendo cariño a este personaje, porque veía como se sacrificaba y sus momentos de dudas entre lo que le dicen que debe hacer y lo que ella cree.

La historia tiene su nivel de aventuras como los anteriores libros de Richelle Mead, también tiene humor y un poco de romance. El romance, este es un punto importante. Si buscaron sobre que trata este libro seguro sabrán que la pareja de esta saga es *redoble de tambores*… Sydney y Adrian

Me encantó la idea porque yo quiero un final feliz para Adrian. A pesar de que quedé contenta con que Rose eligiera a Dimitiri, sufrí un poco por Adrian, pero lo cierto que él no tenía oportunidad ya que Rose siempre estuvo enamorada de su mentor. Sydney y Adrian tienen sus momentos en este libro, nada intenso sino un inicio (muuuuuy prometedor)

Una lectura muy recomendada, si te gustó la saga Vampire Academy te encantará Bloodlines ;)

Mi Puntuación:4

No hay comentarios:

Publicar un comentario